Jacinto para Mi Gitana



Para Gisela

Es evidente que vuestro corazón emana una brasa de incienso
dado tu mirada aviva la fogata en tu sortilegio de gitana,
en la gracia de suspirar la mirra de tu sueños de ocaso
tu alma como aurora, resplandece en el vicio de la natura.

Vida en que los eones han tallado vuestra dicha y belleza,
aun cuando tus pensares hacen vigilia por el infortunio de tu murria
donde esperas cruzar ese umbral a un paraíso fausto
como muestra artífice de tu magia benevolente.

Con tu té de jacinto, la divina locura es una bruma de alegría
o como el dulce sueño de Baco, recogiendo su obra en el viñedo.
En tu hermosura helénica, el oro es mi única ofrenda a tu musa
aunque mis palabras osen retratarte en un lienzo de zafiro.

En las especias de tu caldero, anhelas quemar tu soledad taciturna
y la desnudez de la luna es el afable sudor de tu culto.
Con el oráculo de vuestro nombre consagrado en velo
la mujer misma es un origen inexplicable de carne y hueso.

Mientras tu andar deja su hojarasca en el plenilunio
has impregnado mi esencia con el viento de tu caricia,
marcando el sendero en vuestra próxima estación de vida.

No hay comentarios.:

Publicar un comentario

Suspiros